Ya han pasado cuatro años desde la
puesta en marcha de la revista Estudios, una publicación de carácter
anual editada por la Secretaría de Formación y Estudios del Comité
Confederal de la CNT-AIT. Un proyecto que, echando la vista atrás, ha
ido creciendo con el tiempo, amplificando su estructura y favoreciendo
con ello su recepción en esferas no militantes; lo que sin duda ha
permitido que el análisis político y la apuesta radicalmente
transformadora del anarcosindicalismo se doten de nuevas herramientas
para confrontar el discurso hegemónico tendente a cosificar nuestro
mensaje, equiparándolo a un objeto de museo.
Precisamente por lo anterior, a lo largo de estos años la sección de ANÁLISIS de
la revista Estudios ha tomado como referencia un tema central que ha
permitido a la Organización, en el marco de sus acuerdos, actualizar su
argumentario teórico-discursivo y posibilitar que nuestros análisis y
propuestas de acción puedan permear las barreras interpuestas por los
ingenieros del consenso para frenar la difusión de nuestro ideario,
plasmado cotidianamente en el hacer de los sindicatos que componen la
Anarcosindical.
En ese sentido, para la cuarta entrega de Estudios, cuya sección de ANÁLISIS lleva por título Organización y Acción, pretendemos
estimular la reflexión y el análisis crítico de la situación actual del
anarquismo en el contexto ibérico e internacional. Con ello aspiramos a
realizar un riguroso acercamiento a los procesos de emergencia del
movimiento libertario en varios puntos del globo, analizando los
claroscuros de tal proceso, los retos y exigencias que plantea, buscando
finalmente actualizar nuestros análisis de cara a hacer valer la
apuesta del anarcosindicalismo por la organización obrera como motor de
cambio social con fines revolucionarios. Única Sección reservada para la
militancia de CNT, en esta ocasión contamos con la valoración que
realiza Francisco Javier Ortiz Vargas sobre si es
posible la realización de una auténtica transformación social a través
de los procesos electorales y de la consiguiente acción política desde
las instituciones o si por el contrario, esa transformación debe surgir
de la propia sociedad autoorganizada.
Seguimos con Gaspar Manzanera Benito que,
con una mirada exhaustiva y creativa, haciendo uso de un modelo de
Dinámicas de Sistemas aplicado a la CNT, lanza varias hipótesis, varios
escenarios posibles que permiten discutir qué elementos de la dinámica
sindical tienen más peso a la hora de crecer sindicalmente.
Por último Jordi Vega reflexiona
en torno al hecho de organizarse en el anarcosindicalismo. En base a la
importancia del tipo de estructura del que se dota para funcionar y a
sus acuerdos aporta elementos que considera necesarios en la afiliación
para el funcionamiento eficaz del sindicato desde su perspectiva
revolucionaria.
En la sección de ARTÍCULOS comenzamos con un artículo de José Gil Rivero y Rafael Hernández Carrera que
realizan un estudio descriptivo comparado de la actividad huelguística
en el Estado español durante los sexenios 2002-2007 y 2008-2013,
concluyendo que en el sexenio 2008-2013 el número de huelgas aumentó el
27,67%, en tanto que los trabajadores participantes decrecieron el 64,57
% y las jornadas perdidas disminuyeron el 51,46% con respecto al
sexenio 2002-2007. Dichas conclusiones bien pueden ser objeto de estudio
sobre los factores que influyen en la aminoración de la participación
de los trabajadores en las huelgas en el último sexenio.
Francisco José Fernández Andújar, hace
un análisis crítico del papel realizado por la historiografía,
entendida ésta como el conjunto de métodos utilizados en el estudio de
la historia. Hace patente que dependiendo de la orientación del modelo,
se establecen una serie de criterios, temas y metodología para la
investigación y el análisis sobre diversos hechos. En su artículo hace
defensa de una historiografía anarquista que vaya más allá de las
aptitudes individuales de un autor, que explicasen con más exactitud
tanto la historia del anarquismo en sí, como el de la propia humanidad,
al estar lo libertario relacionado con el problema del poder y la
libertad.
Por último, con Antonio Pérez, la
lectura de una obra publicada por una institución ligada al pensamiento
militarista estadounidense sobre la utilidad bélica del enjambre se
complementa con la lectura de otra obra, esta de antropología
contrainsurgente. Ambas obras nos sorprenden por los préstamos que toman
de los principios básicos del anarquismo, paradójico fenómeno que
atribuimos al prurito de modernidad. Después, se enumeran algunos
ejemplos de su vulgarización mediática en los que se percibe que esos
préstamos perviven escondidos en las interpretaciones del enjambre
natural.
La sección MISCELÁNEAS cuenta en este número con nueve aportaciones. Javier Antón repasa
los avances en la pelea por una Memoria Histórica Libertaria, haciendo
hincapié en la necesidad de que el anarquismo organizado tome en sus
manos esta lucha, sin duda vital para reconstruir nuestro pasado,
dignificar nuestro presente y luchar por el futuro. Por su parte, Jorge Riechmann y María González investigan
en su texto la trayectoria del movimiento ecologista, explicitando los
retos que se nos plantean ante el previsible colapso energético. También
contamos con dos breves aportaciones sobre la buena salud del panorama
editorial de carácter libertario. En ese sentido, Carlos Coca repasa la importancia que ha adquirido la red de ferias del libro anarquista consolidadas en el Estado español, mientras que Juan Cruz analiza
de forma somera algunas de las cabeceras -revistas y periódicos-
vinculadas al movimiento anarquista que han surgido en los últimos años.
También contamos con la traducción al castellano, realizada por Rafael Herrera, de un artículo de Antonis Drakonakis, militante
anarquista heleno, que defiende la necesidad de vertebrar el movimiento
libertario de su país a través de la paulatina conformación de un
tejido organizativo de carácter federalista. Finalmente, la sección se
cierra con cuatro interesantes reseñas: Layla Martínez reseña Cárceles en llamas; Alfonso Molino hace lo mismo con Un cadáver a la intemperie; José Mª Salguero se encarga de El anarquista que se llamaba como yo; por último, Cristóbal Morales reseña la última edición del Catecismo revolucionario.
- Podéis descargarla pinchando en este enlace:
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